Las pérdidas auditivas
Consecuencia de las pérdidas auditivas
La audición nos conecta con la familia, los amigos y los compañeros de trabajo y forma parte esencial de la comunicación diaria. Aunque pocas veces nos paramos a pensar en la función tan importante que nuestro oído, como órgano complejo, desempeña en nuestras vidas.
Ante una pérdida de auditiva, muchas facetas de la vida diaria se vuelven cada vez más difíciles. Actividades cotidianas como conversar o hablar por teléfono se convierten en una tarea compleja para quien padece una pérdida auditiva. En muchos casos la persona que la padece se aisla de su entorno y empieza a disminuir su calidad de vida notablemente.
Consecuencias sociales
Estudios recientes demuestran que las personas con pérdida de audición que no usan auxiliares auditivos experimentan más tristesa, miedo y ansidad que las personas que si los usan. Reducen sus actividades sociales, se vuelven emocionalmente inestables y tienen problemas de concentración.
Por otro lado, estudios recientes demuestran que las personas que usan auxiliares auditivos experimentan un incremento en la calidad de vida tan pronto como los empiezan a usar. Mantienen mejores relaciones familiares, tienen más confianza en si mismos y experimentan más independencia y seguridad.
Consecuencias físicas
Si la pérdida de audición no es tratada, puede traer consecuencias físicas tales como cansancio o fatiga, dolores de cabeza, vertigo y estrés. Estos síntomas no siempre son causados por le pérdida de audición sin tratamiento, pero son muy comunes en muchos casos. Si usted experimenta pérdida de audición y reconoce algunos de los síntomas descritos, necesita ayuda de un profesional.
Una pérdida auditiva es paulatina y progresiva, muchas veces pasa desapercibida y sin causar dolor, pero afecta en gran medida tanto a quien la padece como a las personas que lo rodean por la manera tan difícil que resulta comunicarse, provocando que se alejen de él, algo que resulta triste y totalmente innecesario
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